La ecografía en medicina deportiva
El uso de la ecografía en medicina deportiva permite un diagnóstico inmediato y acorta la recuperación
La ecografía es una prueba accesible que puede hacerse en las primeras horas después de sufrir una lesión muscular y articular, lo que permite realizar un diagnóstico inmediato, un tratamiento precoz y un control evolutivo de esta, acortando así «de manera definitiva» el periodo de recuperación de los deportistas, según ha subrayado el especialista en Medicina del Deporte, Fernando Jiménez.
Esta técnica será el principal eje durante el VIII Curso Superior Universitario de Ecografía ‘Abordaje Integral de la rodilla, tobillo y pie del deportista’, que tendrá lugar en Toledo los días 22, 23 y 24 de junio, con el objetivo de debatir y realizar diferentes actividades prácticas sobre las aplicaciones de la ecografía al diagnóstico y tratamiento de las lesiones que afectan tanto a deportistas profesionales como aficionados.
Así, la ecografía es una técnica de imagen que, a diferencia de otras, permite realizar estudios dinámicos, aportando información para confirmar la presencia de lesiones prearticulares, como la rotura de los ligamentos laterales de la rodilla o las lesiones en los tendones del manguito rotador del hombro, según los expertos.
Además, permite el estudio preciso de zonas anatómicas afectadas por una lesión inespecífica como la trocanteritis, definiendo exactamente el tipo de lesión y precisando el área de tratamiento para la infiltración guiada, para que, de esta forma, al detectar este tipo de lesiones de manera precoz, los periodos de recuperación puedan reducirse de meses a semanas.
En cuanto a las infiltraciones en las articulaciones de las rodillas, tobillo o pie, la ecografía es una técnica fundamental para garantizar el éxito de estas, como por ejemplo en el caso del tratamiento de la fascitis plantar, una lesión habitual entre los corredores que puede convertirse en crónica si no es tratada de manera rápida y eficaz.
«Hasta ahora, la fascitis plantar podía persistir a pesar de las infiltraciones y eso se debía a que el tratamiento se realizaba de una forma ciega; usando la ecografía como guía, garantizamos que el antiinflamatorio alcance el punto exacto a tratar, consiguiendo por tanto, el efecto deseado», ha señalado Jiménez.
Fuente: https://valenciaplaza.com/